Desfigurados seres celestiales caídos, que respiran en el reino de las regiones celestes, son sin afectos, no tienen límite la moral de su malicia, son rapaces legiones, observan al asecho y están para multiplicar la maldad.
Estrategas mentes perturbadas, son deformadores de lo recto y jerarquizan la astucia de su mal, ellos están para destruir.
Gobernadores de las tinieblas, desdichan a los pobres de espíritus, ocultan el consuelo a los que lloran, expulsan a los herederos, violentan a los mansos, dejan hambrientos y con injusticia, son enemigos de la misericordia, oscurecen el corazón, agitan a los pacíficos y persiguen la injusticia.
Ellos son terremoto de terrenos arenosos, crujen sus dientes, azotan la fe de los trabajadores de la viña, debilitan las fuerzas con pesadas cargas y seducen con atajos a los que caminan por las sendas antiguas.
Son espíritus encubiertos, son demoledores de los cimientos de la congregación, están guardados bajo oscuridad, son impulsores en convertir en libertinaje la gracia, no dejan que la luz de Cristo les resplandezca, invisible presente realidad, ángeles que no guardaron su dignidad, son los instigadores de otro evangelio.
Son tinieblas que andan en tinieblas, constructores de argumentos que se levantan contra el conocimiento de Dios, portadores de cepas espirituales del espíritu de Diótrefes, ellos aman la doctrina de las nubes sin aguas, arboles otoñales sin frutos, llevados de acá para allá por vientos, andan según sus propios deseos, inculcan el corromper a los inconsistentes como animales irracionales, llevan a los débiles por el camino de Caín y los lanzan al lucro de Balaam para hacer perecer en las contradicciones de Coré.
Mentes siniestras que atentan contra los llamados, obstaculizan el cumplimento de los propósitos del Eterno.
Principados malignos, fuentes sin agua, y nubes empujadas por tormentas, corrupción de concupiscencia, venden una verdad como mentira, viven practicando malas obras, espíritus inmundos que han dejado el camino recto, son acusadores que carcomen la conciencia, ellos desprecian el señorío, rechazan la autoridad, blasfeman de las potestades superiores, ellos buscan manchar nuestras vestiduras.
Estrellas errantes que matan el potencial de los justos, ellos venden los deseos de este mundo, son tropiezos que hacen tropezar, depravados de la verdad, que engañan aún a los escogidos, no descansan, promueven imitar lo malo, enseñan que de una mentira puede nacer una verdad, se recrean en el error, son falsos testigos de las escrituras.
Leones rugientes que buscan a quien devorar, entran como lobos vestidos de ovejas, espíritus de tinieblas que borran los mandamientos de Dios, practican la maldad, ahogan la semilla, odian la piedad, atrapan con pesadas anclas religiosas a los obreros, son galardón de la injusticia y los que desvían de la doctrina de Cristo.
Herejías destructoras es su hábito, huestes espirituales de maldad que niegan a Cristo y marcan tendencias falsas del mover de Dios, esterilizan frutos, destruyen la comunión de los Santos, son los que confunden las mentes para que abandonen la corona de la salvación.
Escribo con luz, fundamento la fe, su palabra nos advierte a que no ignoremos sus maquinaciones, efesios nos viste de la armadura de Dios, escribo como vigilante con la verdad, verdad que destruye sus tinieblas razones sagaces, ellos son condenados que buscan condenar, y buscan arrastrar tú alma, mi alma, las almas, a las llamas de las prisiones eternas.
Albert Segovia
Director de Generación Emergente Argentina
http://www.facebook.com/pages/Generaci%C3%B3n-Emergente/302390676467339
No hay comentarios:
Publicar un comentario